La viruela es una enfermedad infecciosa.
Es causada por un Orthopoxvirus, uno de los virus más grandes que infectan a los humanos, de unos 300 nanómetros de diámetro, que es lo suficientemente grande como para verse como una mancha bajo un microscopio óptico.
Más que la peste negra, la tuberculosis o incluso el SIDA, la viruela ha afectado a la humanidad de manera significativa, durante más de 10.000 años. Momias, como la de Ramsés V, que data de 1157 a.C., muestran signos típicos de la viruela.
Transmisión de la viruela
Desconocido hasta hace poco, se sabía poco sobre la transmisión de enfermedades causadas por virus.
En el caso de la viruela, se produce por contacto con personas enfermas u objetos que entraron en contacto con la saliva o secreciones de estos individuos.
Una vez dentro del cuerpo cuerpo, el patógeno se propaga por el torrente sanguíneo y se asienta principalmente en la región de la piel, causando fiebre alta, malestar, dolor corporal y problemas gástricos. Inmediatamente después de estas manifestaciones, aparecen numerosos bultos llenos de pus por todo el cuerpo, que apenas se detienen sin dejar cicatrices, y confieren un intenso picor y dolor.

El riesgo de ceguera por afectación corneal, y muerte por bronconeumonía o enfermedades oportunistas, ya que tales manifestaciones comprometen el sistema inmunológico, son riesgos a los que está sujeto el individuo infectado.
Diagnostico y tratamiento
El diagnóstico se realiza mediante análisis por microscopio electrónico del líquido de las pústulas. Los virus son característicos y fácilmente visibles. La viruela no tiene cura. La única medida eficaz es la vacunación.
Causado por Orthopoxvirus variolae, es considerado por la Organización Mundial de la Salud como erradicado desde finales de los años setenta, gracias a la vacunación. En este sentido, a Edward Jenner se le atribuye el descubrimiento de que el contacto previo con el virus, o sus partículas, pudo proteger a las personas contra él. La viruela fue la primera enfermedad en recibir una vacuna, capaz de protegernos de otras enfermedades, como la polio y la rubéola.
A pesar de estar controladas, algunas muestras del virus siguen alojadas oficialmente en el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Atlanta (Estados Unidos) y en el Centro Estatal de Investigación en Virología y Biotecnología de Koltsovo (Rusia). Este factor genera preocupación por el uso de estos organismos como armas biológicas, sobre todo teniendo en cuenta que los individuos más jóvenes no han sido vacunados contra esta enfermedad y que no son inmunes a esta enfermedad, que es incurable.